Shrek 2

Crítica

Julio Vallejo

En el 2001 el estudio Dreamworks, dirigido con mano experta por Steven Spielberg, Jerry Katzenberg y David Geffen, se apuntó un tanto al producir "Shrek", una película de animación por ordenador que dinamitaba la mayoría de las convenciones de los cuentos de hadas tradicionales. La película, un verdadero prodigio de la técnica, nos contaba los intentos de Shrek, un ogro bueno, y Asno, un burro parlanchín, por rescatar a la princesa Fiona, una princesa acosada por una maldición. Al final, y alterando bastante las reglas de los cuentos tradicionales, el ogro se queda con una princesa que resulta ser una ogra.

Después del impresionante éxito del filme, Dreamworks encargó a Andrew Adamson, el director de la primera, y a otros dos profesionales, Kelly Asbury y Conrad Vernon, la realización de una segunda parte. El resultado es Shrek 2, un filme que mantiene el nivel de la película original y lo amplia añadiendo nuevos personajes. Aquí, como en el primer filme, se vuelven a repetir los ingredientes del éxito: guiños cinéfilos, un guión lleno de buenos diálogos, actores prestando voz a los personajes y una banda sonora llena de canciones pop.

En esta ocasión, y parodiando en cierta medida películas como "Los padres de ella", la película se centra en los problemas de Shrek para ser aceptado por el padre de Fiona, un rey que no parece tener claro que un ogro verde sea el mejor partido para su hija. Para librarse de él, el padre de Fiona contratará los servicios de Hada Madrina, una verdadera bruja que quiere colocar a Príncipe Azul, su amanerado hijo, en el trono del Reino de Muy Muy Lejano.

Con este argumento, los guionistas y directores del filme vuelven, como en la primera parte, a ofrecernos una película que mezcla de manera genial aventura y comedia. Además, también se repite la moraleja de la primera: las apariencias engañan.

Sin embargo, a pesar de repetir esquemas y estructuras, los responsables del filme han introducido algunas novedades. Una de las principales es la inclusión de un nuevo personaje: el gato con botas. El minino, que cuenta con la voz de Antonio Banderas, se convierte en el gran robaescenas de la película. Sus divertidos diálogos -que parodian en cierta manera los personajes del actor malagueño en "La máscara del Zorro"o "El guerrero número 13"- y su adorable aspecto convierten al personaje en uno de los hallazgos de un filme lleno de chistes, gags e inventiva.

Por si fuera poco, "Shrek 2"nos ofrece una divertido y entretenido juego para aquellos cinéfilos empedernidos. Entre otros, el filme incluye referencias a "De aquí a la eternidad", "Alien", "Flashdance" o "Misión imposible".

En definitiva, "Shrek 2" es una de las películas más divertidas que se han podido ver en los últimos años.

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