El territorio de la bestia

El director Greg McLean logró el beneplácito de los fans del terror, entre los que se encontraban Quentin Tarantino y Robert Rodríguez, con "Wolf Creek", una película que seguía los pasos de dos chicas y un chico que deciden visitar un famoso lugar turístico y se encuentran con un paleto con instintos asesinos. Con estos mimbres, el realizador consiguió un filme de ambiente inquietante que bebía de clásicos de los setenta como "La matanza de Texas".

"El territorio de la bestia", el segundo largometraje de McLean, reincide en ese género de terror que parece encontrar su inspiración en las películas de serie B que inundaron los cines de barrio desde los cincuenta hasta los primeros ochenta. La película narra las peripecias de un periodista (Michael Vartan), la capitana de una nave que recorre un bonito paraje natural (Radha Mitchel) y los algo despistados pasajeros de la embarcación. Su pacífico viaje se verá interrumpido por un cocodrilo que no parece dispuesto a que invadan su territorio.

El argumento, como se puede ver, no es precisamente el colmo de la originalidad. Pese a todo, McLean saca cierto partido del paisaje y parece dotado para provocar cierto clima desasosegante. Sin embargo, la película no termina de funcionar debido a un guión que parece avanzar a trompetazos y a unos personajes que no se acaban de ganar la simpatía del espectador. La cinta no aburre en ningún momento, pero tampoco llega a resultar excesivamente apasionante como para ser considerada más que un producto correcto. No ayudan mucho las sosísimas interpretaciones de Michel Vartan, conocido por su participación en la serie "Alias", y Radha Mitchel, protagonista de "Melinda y Melinda" o "Pitch Black". En definitiva, un filme que entretiene mientras se ve, aunque se olvida rápidamente una vez que abandonamos la sala.